Atreverse a prohibir

Estamos en una sociedad donde muchos tienen miedo de la exigencia que supone la educación. Se dice que es necesario ser tolerante, dejar actuar a cada uno según sus necesidades, sus ideas y sus instintos (...). La educación implica saber prohibir. Prohibir a alguien que tome alcohol si existe peligro que se vuelva alcohólico. Prohibir a un hombre ir en bicicleta por el pueblo si corre el peligro de atropellar a alguien o de ser atropellado. Prohibir a un hombre golpear a uno más débil o aprovecharse de él. Hacer todo lo posible para evitar que alguien se sumerja en un "sistema cerrado", en la tristeza y la angustia del aislamiento. Esto exige mucho tiempo, mucho amor y firmeza, muchos esfuerzo. La educación es una lucha contra la desesperanza, contra la negativa, contra el refugio en lo fácil.

Jean Vanier, Hombre y mujer los creó, P 59